Uganda, el Congo y los refugiados. Lo bueno, lo malo y lo feo. 

Lo feo. 

¿CUÁL ES EL PROBLEMA CON EL CONGO? YO SOY. Y TU TAMBIÉN.

Durante el mes de agosto, Suzanne y yo nos ofrecimos como voluntarios en Uganda, haciendo nuestro mejor esfuerzo para ayudar con la afluencia de refugiados congoleños que se extienden por la frontera. ¿Por qué huyen de su tierra natal? ¿Ébola? Algunos. Pero la gran mayoría está huyendo debido al disturbio extremo, la violencia y la tortura, promulgada por las milicias rivales (gubernamentales y rebeldes) que no se detendrán ante nada para controlar algo que usted y yo damos por sentado y que estamos usando justo en este momento. Nuestros teléfonos. Así es, leíste correctamente. Tu teléfono ha matado gente. Sí, también leíste eso correctamente. Vimos a bebés y niños hambrientos muriendo de malaria debido a lo que estoy usando para escribir este mensaje, mi iPod. ¿Cuál es el problema con el Congo? Soy yo, y tú también.

La República Democrática del Congo ha tenido muchas dificultades a lo largo de su historia. Décadas de corrupción interna y epidemias, y países extranjeros que se aprovechan de ella. Pero nada peor de lo que las industrias tecnológicas y electrónicas del mundo han hecho y están haciendo para obtener lo que está debajo de sus suelos. El Congo tiene las reservas de minerales más ricas del mundo, y las grandes empresas tecnológicas lo necesitan. Todo.  

Los gigantes tecnológicos que compiten, como Samsung, Amazon, Google, Huawei, Sony, Microsoft, HP, Apple, Dell... no se detendrán ante nada para obtener los metales del Congo, como el estaño, que se utiliza en las placas de circuitos, el tantalio para almacenar electricidad, tungsteno para la estúpida función de vibración, oro para el recubrimiento de cables, (incluso el uranio que usaba EE. UU. para construir las bombas atómicas que arrojaron sobre Japón provenía del Congo) ... pero lo que más se necesita es el cobalto, un metal aburrido de color azul grisáceo esencial para alimentar a nuestros teléfonos, computadoras portátiles y vehículos eléctricos. En un esfuerzo por tratar de hacer esto lo más breve posible, solo hablaré de los teléfonos, que total, SOLAMENTE hay más de 5 MIL MILLONES de ellos en el mundo.

Para decirlo de una manera simple, nuestra necesidad de tener el último dispositivo y el más genial, algunos niños congoleños de tan solo 7 años, a quienes casi no se les paga, pasan las 24 horas del día en profundos hoyos oscuros y abandonados para poder desenterrar algo de cobalto, para que podamos usar nuestros teléfonos, porque no nos importa una mierda lo que hay dentro de nuestros dispositivos o cómo llegó allí, mientras funcione y sea barato. Incluso si el teléfono que tenemos funciona perfectamente bien (o si se malogra, las hacen imposible de arreglar a propósito), cada dos meses las compañías de tecnología, nos hacen sentir que necesitamos el teléfono más nuevo. Lo cual significa más cobalto y precios cada vez más altos para obtenerlo, más trabajo infantil y luchas viciosas por el control de las minas por parte de algunas de nuestras empresas más grandes como Google y Amazon, que resulta en decapitaciones y violaciones, que resulta en cientos de miles de personas necesitando seguridad en un país pacífico pero pobre como Uganda, que resulta en escasez de comida y agua, en falta de viviendas adecuadas, por lo que usan mosquiteros como cuerdas para construir simples chozas de barro, que en a su vez resulta en infecciones de malaria, deshidratación, cólera y desnutrición, y muertes. En ese orden.  

Las grandes empresas poderosas como Microsoft y Google saben de esto, todos lo saben, incluso si lo niegan o hacen algo incorrecto. Son negocios y su objetivo es ganar mucho, mucho dinero. No les importan los niños africanos que cavan en la tierra para ganar una miseria que se vuelven refugiados porque los jefes militares que mandan en estas minas horrorosas, que son financiados por estas compañías, matan a cualquiera que no trabaje para ellos. Estas compañías tecnológicas solo necesitan minerales para sus baterías al precio más barato para que tú y yo podamos comprar el dispositivo más nuevo, una y otra vez. Es así de simple.  

¿A alguien le importa? Si es así, ¿qué podemos hacer al respecto? No importa cuánto digamos que nos preocupamos por estos congoleños, nosotros, como raza humana, no vamos a dejar de usar teléfonos. Estamos voluntariamente esclavizados por ellos, son parte de nuestra vida cotidiana. Casi no podemos funcionar sin ellos. 
Sí, es un problema complicado. Es fácil no preocuparse por estos detalles, estos "detalles" humanos, porque están en África central y nunca los veremos. Es más importante que la batería de nuestro teléfono dure hasta que lleguemos a casa del centro comercial. Sería más difícil ignorarlo si solo estuvieras allí, aprendiendo sus nombres, haciendo amigos, riendo juntos, frustrándose juntos, siendo parte de su lucha juntos, viéndolos morir a algunos.

No tengo una respuesta, pero creo que tengo algunas ideas sobre cómo podemos vivir nuestras vidas con estos teléfonos sin ser, incógnitamente, una parte o un contribuidor importante del problema. Algunos de ustedes han donado amablemente a nuestros amigos congoleños, y se lo agradecemos mucho. Algunos también han preguntado qué más pueden hacer para ayudar. Eso es todo. Deja de comprar cosas. Teléfonos, automóviles, zapatos, ... Los Estados Unidos forma el 5% de la población mundial y consume el 25% de los bienes del mundo. Este es el problema. ¡Por el amor a la humanidad, detenlo!  

Una vez, un pequeño hombre indio que dijo: "Sé el cambio que deseas ver en el mundo.” Es una cita demasiado usada para lo poco que se practica. Pero eso es todo lo que tengo. Estos gigantes tecnológicos, como Amazon o Apple, solo piensan en términos económicos. Solo nos escucharán si dejamos de comprar lo que nos ofrecen. Si queremos cambiar estas desigualdades, entonces debemos ser el cambio y hacer algo al respecto.

Entonces, ¡DEJA DE COMPRAR TELÉFONOS NUEVOS! De lo que he aprendido, esta parece ser la verdad. El mejor teléfono, en cuanto al medio ambiente, el trabajo infantil y los refugiados, que puedes conseguir hoy en día es EL TELÉFONO QUE YA TIENE. Ampliar la vida útil del teléfono que ya tenemos es la mejor manera de reducir el impacto duradero en nuestros compañeros humanos y nuestro planeta. Cuanto más lo conservemos, más sostenible se vuelve. Hay muchos consejos sobre cómo mantener el mayor y mejor funcionamiento de su teléfono. Si le importa detener el trabajo infantil, búsquelos. Estas son cosas que podemos hacer, juntos, hoy.

Si tienes que comprar un teléfono, compra el teléfono más ecológico que existe, CUALQUIER TELÉFONO USADO. Hay millones de teléfonos restaurados a la venta, y a un precio bastante más barato que uno nuevo. Si te interesa ayudar a los refugiados como aquellos que ves en las imágenes que compartimos, haga esto.  

Si necesita comprar un teléfono nuevo, considera Fairphone, ( fairphone.com) 

Pero NO COMPRE UN TELÉFONO CHINO. Las organizaciones chinas son propietarias del Congo y la mayoría de estas minas de cobalto están dirigidas por sucias corporaciones chinas que no tienen problemas con el trabajo infantil forzado o los refugiados. Las historias y documentales de estas organizaciones son horribles, búscalos. Y la mayoría de las veces, nuestras preferidas empresas tecnológicas en Estados Unidos les compran a estas corporaciones chinas. Hay una razón por la cual algunos teléfonos son baratos, y no es porque quieren darte un descuento. Es porque usan mano de obra esclava para reducir su costo de fabricación y luego “te pasan los ahorros.” Es extraño decirlo, pero cuanto más caro sea un teléfono, la probabilidad es mayor de que haya transparencia justa en la cadena de producción llegando hasta los niños congoleños. Si realmente necesita un teléfono nuevo y odia a los pobres niños africanos negros, compre un teléfono barato de China, o un teléfono de Amazon. Si desea tener un dispositivo increíble que cabe en su bolsillo, saber de dónde viene y tener la confianza de que nadie fue asesinado, desplazado o incluso dañado de forma remota en el proceso de elaboración de este instrumento mágico, entonces investigue un poco y trabaje uno o dos días más por año para que pueda permitírselo, y de esa manera podrás dormir por la noche y vivir contigo mismo sin la culpabilidad que ahora nunca podrás olvidar.

Es alentador ver que algunos de los líderes mundiales en tecnología se toman esto en serio. ¡Finalmente! Gerentes generales como Tim Cook de Apple están a la vanguardia en la lucha contra el trabajo infantil, el cobalto, la igualdad de derechos y la eliminación del “intermediario" sucio. Pero, nuevamente, ayer, Apple lanzó su nueva versión del iPhone, algo que en realidad nadie necesita.

No podemos simplemente esperar a que estas compañías cambien. Solo quieren nuestro dinero y no les importan los refugiados que crean a quienes Suzanne y yo tuvimos el placer de conocer. La mayoría de ustedes que leen esto viven en un mundo privilegiado materialista, constantemente consumiendo basura capitalista que produce refugiados que son excluidos de estos mismos privilegios.  

No tenemos que aceptar este tipo de vida. 
Consumamos menos.  
Como dijo ese hombrecito de la India, debemos "ser el cambio que deseamos ver en el mundo". 
Diariamente podemos hacerlo.