“Los mismos océanos se cruzaron. Para algunos es placer, para otros es un dolor ”.

En esta semana hace 4 años, estábamos en la hermosa isla griega de Lesbos, pero no de vacaciones. Lesbos es una de las tierras europeas más cercanas al Medio Oriente y Asia, donde intentan y mueren por llegar, miles de refugiados de aquellos lugares y también del norte de África.  

Hicimos todo lo posible por ayudar a mucha gente de Siria, Palestina, Yemen, Somalia, Sudán, Eritrea, Afganistán, Irak, Pakistán, Irán ... a aterrizar de manera segura en esta pequeña isla y asistir con su refugio y dándoles atención médica lo mejor que pudimos. Vimos lo peor de la humanidad y también lo mejor de ella.

Si los refugiados tenían suerte aterrizaban en la orilla del mar, y después se encontraban en el "campamento" Moria, repleto y peligroso, agitado, desorganizado, pero con asistencia sincera dirigida por humanitarios de todo el mundo, como nosotros. Con muy poca ayuda de Grecia y de las organizaciones oficiales de refugiados, esta variada tripulación apenas pudo evitar que esta isla explotara. Encontraban comida, carpas y bolsas de dormir, regalaban zapatos, atención médica, dinero, transporte y amor, fue hermoso ver que algunas personas en este mundo se preocupan por darles la bienvenida a nuestras hermanas y hermanos. Después de tocar tierra segura, algunos refugiados lloraban, algunos se desmayaban, muchos le agradecían a Dios, otros besaban el suelo o a nosotros.   

Eso fue hace 4 años hoy, y todavía nos mantenemos en contacto con algunos a quienes asistimos y que ahora se encuentran seguros, trabajando y contribuyendo en Europa. Desafortunadamente, en esta isla griega, no mucho ha cambiado y hoy, podría ser aun peor. Este mes, Lesbos ha "acogido" a más de 2,500 refugiados, ¡y a más de 20,000 este año! Por quinto año consecutivo, el número de muertos en el mar Mediterráneo ha alcanzado más de 5. 

Mientras que algunos de nosotros, los occidentales privilegiados, tomamos un descanso del frío y reservamos un crucero por los mares del Mediterráneo o el Caribe, recuerden, "los mismos océanos se cruzaron, para algunos es un placer, para otros es un dolor".